Mostrando entradas con la etiqueta tomate. pepinillos. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta tomate. pepinillos. Mostrar todas las entradas

domingo, 10 de abril de 2011

Pimientos de piquillo rellenos de verano

Pensaba rellenar unos pimientos de piquillo con un ajoarriero pero dado el día tan pesado de calor que tuvimos ayer en Valencia, decidí reconvertir la receta en algo más ligero y refrescante. Resultado: unos pimientos rellenos de cositas frescas.

Ingredientes:

2 latas de pimientos de piquillo
250 gr. de mascarpone
3 pepinillos agriduldes
una lata de hígado de bacalao ahumado
un champiñón
un buen puñado de tomates secos
ramitas de hinojo
sal y pimienta

Pon los pimientos en un plato o fuente para hornearlos un poco. Ponles una lluvia de azúcar y hornea a 180º durante 6 minutos.
Los tomates secos hay que hidratarlos, así que pon agua caliente en un bol y pon dentro los tomates secos para que se hidraten.
Mientras prepara el relleno. Escurre bien el hígado de bacalao del exceso de aceite. Corta en trocitos bien pequeños el champiñón, una vez lavado bien, los pepinillos y las ramitas verdes de hinojo. Junta esto con el queso mascarpone.
Corta los tomates secos una vez hidratados en trocitos muy pequeños. 
Si te gusta el sabor más fuerte, puedes poner dos latas de hígado de bacalao, más pepinillos, o táperas o cualquier verdurita en vinagre le irá bien. El crujiente y el contraste de sabor van fantástico para la cremosidad y suavidad del queso.
Deja que los pimientos se atemperen y comienza a rellenarlos con suavidad y paciencia.
Puedes presentarlos sobre hojas de lollo u otras hojas de lechugas y poner una reducción de vinagre balsámico para darle color y contraste. Es un plato delicioso como entrante o para completar una ensalada.

Coste: barato
Tiempo: media hora
Dificultad: ¿?

¡Bon profit!

sábado, 6 de junio de 2009

Ensaladita de verano (ensalada de patata)


Ahora que ya hemos entrado en la época de calores, seguiremos buscando recetas que nos saquen de la cocina y que nos proporcionen una comida sabrosa y fresca.
Esta ensalada me recuerda a mi infancia: era la ensalada de verano, con la que acudíamos a la playa dentro de una fiambrera para tomarla con gran apetito después de varios baños en el agua y no se cuantos castillos hechos en la arena. Es una ensalada nutritiva y fresca.

Ingredientes:

Una patata de buen tamaño
2 huevos cocidos
1 tomate hermoso (o varios pequeños)
2 latas de atún en aceite
3 pepinillos agridulces
1 cebolleta
sal, aceite y mostaza


Cuece la patata en agua abundante y ponla entera, con piel. Una vez esté cocida, retira del agua y deja que se enfríe.

En un bol grande pon: la patata pelada y cortada en trozos grandes (es mucho más fácil si la pelas estando totalmente fría), también la cebolleta en trocitos muy pequeños, el tomate en pequeños trozos, los pepinillos también cortados en pequeños trozos. Pela los huevos y también añádelos a trocitos.

Retira de las latas de atún el aceite sobrante y desmígalo en la lata para que así no tengas que hacerlo en el bol con todos los otros ingredientes y que terminaría deshaciendo la patata.
En un pequeño tarro pon una pizca de sal, una cucharada de café de mostaza de Dijon y un buen chorro de aceite como cuatro veces el volumen de la sal y la mostaza juntas. Cierra el bote y bátelo con energía para que el aceite emulsione junto con los otros ingredientes. Una vez emulsionado añádelo sobre la ensalada.
También puedes poner unas aceitunas rellenas o sevillanas o algunos trozos de pepino o pimiento rojo (también en trozos muy pequeños). Todo esto es opcional.
Remueve y ponlo en la nevera durante varias horas (de hecho está más buena si la realizas por la noche y la comes al día siguiente) para que se refresque y que se mezclen los sabores.



Coste: barato
Tiempo: con la patata y los huevos cocidos, menos de media hora
Dificultad: mmmmmm poquita poquita ¿si?

¡A disfrutar!